Las personas mayores: Objetivo del fraude en Aragón

Tristemente la crisis es el principal motor para el aumento del fraude en España. Desde siempre han existido este tipo de delitos, pero lo más lamentable es que según un estudio, las personas mayores son las victimas más numerosas.

Es el grupo social más frágil y vulnerable. El sector de la venta puerta a puerta, las llamadas telefónicas, los mensajes a móviles  y los centros de mayores son los más utilizados por este tipo de personajes que amparados en la legalidad se aprovechan de la ingenuidad de los mayores para su propio beneficio.

La venta a domicilio de todo tipo de productos mediante un “descuento” y una cantidad irrisoria (que no indican que es cada mes ni por cuánto tiempo) y las dificultades de devolución que poseen estos productos hacen de este fraude uno de los mas realizados.

A su vez acuden a centros de mayores para realizar reuniones extremadamente preparadas para las que en principio de una forma gratuita realizarles, por ejemplo, un examen de audición para después ofrecerles un audífono a unos precios poco asequibles para la economía de estas personas. La unión de consumidores de Aragón ha pedido a los ayuntamientos que prohíban la entrada de este tipo de comerciales a los centros cívicos y demás locales sociales.

Otro tipo de engaño son las llamadas desde call centers en las que interrogan al individuo para luego manipular la grabación y utilizarla como un contrato verbal difícil de deshacer.

La suscripción involuntaria a mensajes de móvil que sin darse cuenta les cobran todos los mensajes recibidos por la empresa subscriptora también erosiona la economía de este sector social.

Todo esto provoca además un miedo en los mayores que les hace recluirse para evitar estos problemas, que no abran la puerta a nadie, por lo que se vuelven innecesariamente dependientes.

La unión de consumidores de Aragón y la Diputación Provincial de Zaragoza, ayudados por la policía local y la guardia civil, están realizando una campaña dirigida a los mayores y a sus familiares para que aprendan a decir algo tan simple como “no me interesa”.

Fuente www.heraldo.es